miércoles, 11 de marzo de 2015

Existir es Pensar

Yo soy lo que yo pienso. Según Descartes la demostración de que existimos es que pensamos, "Cogito ergo sum". Siguiendo a este autor, me gustaría analizar si nuestra vida es pensamiento, razón: ¿podemos guiar nuestra vida por la razón o sería más conveniente guiarla por los impulsos?
Podemos dejarnos llevar por el deseo inmediato, por el placer. Pensar solo en el ahora, en el presente, no tener en cuenta el futuro. Podemos vivir sin reflexionar, sin dudar, sin pensar. Sin embargo, también podemos hacer lo contrario, guiarnos por la razón, pensar para existir. Decidir qué queremos hacer, diseñar nuestra propia vida y no dejar que nos la diseñen.
Creo que en lo que consiste la vida es en reflexionar, en decidir, en dirigir la vida que queremos, alcanzar nuestros sueños. Razón, pensamiento. Nuestra vida tiene que tener un para qué. Existir pensando no significa renunciar a los placeres de la vida, incluso la búsqueda del sentido de tu vida. Encontrarlo, decidir y cumplir lo que tú deseas puede ser un gran placer.
Guiarnos por nuestros impulsos, nos arrastra a lo que hacen todos, a no ser únicos, a la ignorancia. Si no pensamos perdemos nuestro pensamiento crítico, no existiríamos como individuo sino como masa. No creo que existir sea dejarnos llevar solo por el placer, vivir como animales, existir es hacer tú vida. Si tú vida no tiene un sentido que tú hayas decidido, de qué sirve existir. Hasta hace pocos años, por ejemplo, las mujeres, que tenían como rutina casarse, tener hijos... Las mujeres que no podían estudiar, no podían pensar, decidir. ¿Es esto existir?
El pensar, existir, guiarnos por la razón, es también una responsabilidad. El ejemplo más cercano que veo en este momento es el de mis compañeros, y el resto de jóvenes. Estamos buscando nuestro sueño, decidiendo qué queremos hacer con nuestra vida, estamos pensando y existiendo. Podríamos muchas veces guiarnos por el placer y los deseos, en lugar de estudiar para los exámenes finales, podríamos salir de fiesta pero decidimos no hacerlo. Sabemos que lo que de verdad queremos es aprobar para así lograr nuestros objetivos, y diseñar nuestra vida.
Pensar y existir como individuos que deciden que reflexionan aparte de ser una opción también creo que debe ser una obligación sociopolítica. Como sociedad si no pensamos nos convertimos en una masa ignorante, manipulable, y esto lo más lógico es que derive en una sociedad injusta, porque siempre habrá gente que decida por nosotros y pensando sólo en su bienestar. En este caso de qué serviría existir, si dejáramos que se cometieran enormes injusticias sin hacer nada, como muchas veces ha pasado a lo largo de la historia y está pasando, ¿Existimos de verdad si dejamos que decidan por nosotros?



Pienso luego vivo, pienso luego resisto, pienso luego decido, pienso luego protesto, pienso luego lucho...pienso luego existo. Sum ergo cogito.

1 comentario:

  1. Buen texto, Estela. Tienes una vena poética que no debes dejar de cultivar.
    Saludos

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